El aluminio tiene numerosas características que lo hacen ideal como material de embalaje para alimentos. Mantiene su propiedad barrera contra la luz, humedad, aromas y microorganismos incluso en láminas de 6/1000 mm de espesor; es ligero, es un gran transmisor del calor, lo que facilita el enfriado y congelado; resiste las altas temperaturas y además es reciclable.
Por todas estas razones ha sido un envase tradicionalmente muy apreciado. Ahora, gracias a un tratamiento especial desarrollado en Dinamarca, incorpora dos propiedades fundamentales: es termosellable y microondable. El sellado térmico con film no era posible hasta ahora por la falta de adherencia del aluminio y los formatos existentes. Ahora, con el desarrollo de un lacado especial y el diseño de envases con superficie suficiente y un diseño estable y resistente, es posible realizar un termosellado eficaz y seguro, incluso con líquidos. Ello abre un enorme campo para todos aquellos productos que sean susceptibles de recibir tratamiento térmico, y que necesiten una cierta durabilidad.
En las nuevas bandejas de Ready2Cook® aluminium es posible cocinar productos hortofrutícolas, que gracias al termosellado y a la propiedad barrera del aluminio es posible conservar en atmósfera protectora y poner al horno o microondas directamente en el envase. Se trata de una cocción más higiénica y cómoda, que no puede realizarse en envases plásticos de Polipropileno puesto que estos no soportan las altas temperaturas tan bien como el aluminio. Además, la congelación es más rápida que en otros envases plásticos.
Es por tanto ideal para excursiones, para uso en barbacoas o para soluciones de cocción limpia, tanto para frutas como verduras. Patatas cortadas ya envasadas, horneadas directamente en el horno tan sólo agujereando el film superior para dejar que se libere la presión de la humedad interior… sin manchar nada, es sólo una de las múltiples aplicaciones que podemos dar a este nuevo envase.
Otras aplicaciones en las que los productos hortofrutícolas pueden encontrar una nueva salida al mercado con un mínimo procesamiento y con las ventajas de la durabilidad que da el MAP y el congelado son manzanas asadas, brochetas de verduras, piña cortada y troceada flambeable directamente en el envase, macedonias, brochetas de frutas, o tartas.
Con este envase y un mínimo de tecnología de tratamiento y envasado, se hace posible para los fabricantes hortofrutícolas acceder a un mercado que tiene un gran potencial de crecimiento: verduras y frutas limpiadas y cortadas, listas para cocinar y sin manchar. El frescor es uno de los mayores alicientes de esta clase de productos, pero no es menos cierto que su fragilidad es también uno de sus mayores inconvenientes. La gente come menos fruta y verdura porque tiene que cortarla, trocearla y cocinarla. Es menos cómoda… La más exitosa es, precisamente, la más maleable (como la patata). Pero con este envase es posible ofrecer verduras que pueden pasar del lineal refrigerado al horno o microondas (o sartén), sin tener que cortar, limpiar o manipular más allá de abrir el envase.
ES-1987
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