¿Nos fijamos en el nuevo etiquetado de los alimentos?

¿Nos fijamos en el nuevo etiquetado de los alimentos?

Un 63% de los consumidores no ha percibido cambios en el nuevo etiquetado de los alimentos, según el ‘Estudio del comportamiento del consumidor sobre la información alimentaria”, realizado por la Confederación Española de Cooperativas de Consumidores y Usuarios (Hispacoop).

Para elaborar este estudio se ha contado con la opinión de 1.511 consumidores, que han sido entrevistados por teléfono y a través de la plataforma online de Eroski Consumer. El objetivo es saber el nivel de conocimiento de los cambios realizados en la normativa aplicable a todos los alimentos destinados al consumidor, basada en el Reglamento de la Unión Europea 1169/2011.
En el momento de la encuesta, el 63% de los responsables de compra encuestados y que habitualmente se fija en el etiquetado de los alimentos, no ha notado cambios en este canal de información. El resto, quienes perciben cambios, destacan las modificaciones en los ingredientes que causan alergias o intolerancias (17%) y en la claridad de la información nutricional y el origen vegetal de los aceites y grasas (10%).

Uno de los cambios más importantes de la nueva normativa se refiere a la obligatoriedad de la información nutricional. En la encuesta, un 72% de los responsables de compra confirma que se fija en ella. Para el 32% el dato más relevante es el relacionado con las grasas saturadas, mientras que para el 23% es el valor energético.

Asimismo, el nuevo reglamento hace obligatorio incluir en el etiquetado el país de origen o lugar de procedencia del producto alimenticio o del ingrediente principal, en los casos en los que se puede inducir a engaño al consumidor. El 68% de los consumidores se fija en este dato; de ellos, el 90% escoge productos producidos en su región o país.

Otro de los cambios contemplados por la normativa de información alimentaria tiene que ver con la obligatoriedad de informar sobre los ingredientes o sustancias que pueden causar alguna alergia o intolerancia alimentaria. El 90% de los consumidores considera que debería indicarse de una manera más clara la existencia de ingredientes que pueden causar alguna alergia o intolerancia.

Fuente: infoRETAIL