Del envasado a la internacionalización

Del envasado a la internacionalización

Aunque el objetivo principal del envoltorio en frutas y hortalizas es la protección del producto que contiene, debemos reconocer que el sector dedicado al envasado ha escalado posiciones en los últimos años en el ranking de prioridades de las compañías hortofrutícolas. Y es que, a pesar de que el protagonista es aquello que incluye en su interior, el embalaje es el escaparate que impulsa al consumidor a decantarse por una marca u otra.

Las empresas del sector son conscientes que llamar la atención del cliente es un elemento de gran importancia. Por ello la presentación y llegar al consumidor con el 100% del producto en las condiciones óptimas de consumo, es una característica diferenciadora que contribuye a la creación de marca tanto o más que el propio producto que se presenta.

El diseño del mismo debe ser coherente con el púbico final al que va dirigido y estudiarlo cuidadosamente antes del lanzamiento, ya que puede significar su éxito pero también su fracaso. De la misma manera, el packaging es un elemento de suma importancia en el proceso de internacionalización de una compañía. El diseño es la tarjeta de visita que la empresa escoge para entrar en nuevos mercados. Por ello, hay que tratarlo como estrategia empresarial adecuándolo al mercado que lo recibe, a sus hábitos de consumo o a las claves culturales del lugar, entre otros factores. Tanto en mercado nacional, como a la hora de internacionalizarse, es básico el estudio de las prioridades y gustos de los consumidores para saber cómo conseguir que el producto a promocionar aúne funcionalidad, suponga un valor añadido para el consumidor y sea sostenible – característica que es requisito en muchos lugares para ampliar el abanico de clientes-.

Según datos de la ONU, más de mil millones de toneladas de alimentos se desperdician anualmente, una cifra que puede reducirse de manera significativa usando el embalaje adecuado. En este punto está de acuerdo la Federación Europea de Fabricantes de Cartón Ondulado, FEFCO, quien también señala que el correcto envasado garantiza la seguridad alimentaria, mejora la gestión logística y la correcta identificación del producto.

Por todo ello, la inversión en investigación se ha convertido en aliado del sector del embalaje consiguiendo avances que repercutirán, a corto plazo, en los gastos derivados del desperdicio de alimentos que se producen en la cadena de valor. Cartón que absorbe etileno para reducir la velocidad de maduración de los productos frescos, film biodegradable que alarga la vida útil del alimento que cubre, compuestos de origen natural que contienen propiedades antimicrobianas y antioxidantes, el desarrollo de una película comestible que añade calcio a la fruta o los packs inteligentes son algunos de los ejemplos en los que centra el sector del envasado su investigación para ayudar a reducir el desperdicio.

Además, el estudio del comportamiento de los consumidores, anteriormente mencionado, ha puesto en boga tipos de empaquetados que ayudan a tener una mayor acogida por parte del segmento al que van destinados; como el empaquetado para ‘singles’, los productos de IV gama o el envasado que está emplatado y listo para consumir.

Avances derivados del estudio del sector que, mediante la innovación, revolucionan y mejoran la comercialización y el consumo de productos frescos.

En FRUIT LOGISTICA 2014, entre las diez candidatas a alzarse con el Premio a la innovación que distingue al mayor avance del año, se encontraban tres novedades del sector de packaging: Las redes de embalaje de celulosa de madera de haya reutilizable como abono orgánico, los envoltorios reutilizables de plástico para plátanos y, la ganadora, la compañía suiza Eisberg, que presentó el BBQ Grill Mix, un producto de V gama que presenta combinados de verdura listos para la parrilla dispuestos en un contenedor de aluminio reciclable con una hoja de metal especial que mantiene los productos frescos durante más tiempo.

Fuente: FruitLogistica